EL PALACIO DE VERSALLES EN LA ARQUITECTURA BARROCA
Constituye una expresión del arte el palacio de Versalles, enclavado en la arquitectura barroca francesa, de la época que te ofrecemos brevemente marco histórico.
La monarquía absoluta se instaura en Francia desde los tiempos de Luis XI como uno de los reinados que propiciara la unificación política del país y que otorgara a los reyes poderes ilimitados.
Luis XIII (1610-1643) durante su reinado fue apoyado en la implementación de la política absolutista por el cardenal Richelieu, así como lo hiciera Luis XIV (1643-1715), también conocido como el rey Sol, quien se valió de los inestimables servicios de Colbert en la consolidación más tarde del absolutismo.
El absolutismo significó para Francia, desde el punto de vista económico, un aumento en el comercio, en las relaciones mercantiles y monetarias, en la extensión del mercado interior, en el desarrollo de la industria y en la gran expansión colonial.
Ya en 1685 se vislumbra decadencia en la economía francesa. En los finales de siglo, en Francia, el apasionamiento religioso se eleva al punto de convertirse en doctrina gubernamental.
Se vive por parte de los moradores una precaria situación de hambruna, mientras los aristócratas están en una sinigual opulencia en sus mansiones palaciegas barrocas. Este contexto condiciona el estallido de la revolución burguesa de 1789.
El Barroco, como movimiento cultural y artístico de finales del siglo XVI y hasta principios del XVIII, surge a manera de resistencia hacia las rectas normas clásicas del Renacimiento. En Francia es un arte particularmente de la nobleza y de la corte.
La clase aristócrata y la realeza construyen grandes palacios, edificios típicos, bajo el reinado de Luis XIV, rey Sol, quien acentúa su poder monárquico; al subir al trono equipa al palacio con el objetivo de prolongar sus estancias, pero más tarde decide engrandecerlo, ampliar la edificación con el fin de trasladar la corte hacia allí, los reyes residían entonces en el palacio del Louvre, actualmente, museo con el mismo nombre.
Charles Le Brun pinta y ornamenta las dependencias del palacio, Le Van le añadió dos alas crecidas en el centro del mismo patio; nuevas dependencias se fueron añadiendo en el tiempo hasta que cobra su aspecto definitivo.
Se vincula la jardinería con la arquitectura; el trabajo hecho en los jardines con la construcción de escalinatas que descendieran al plano del jardín, las fuentes adornadas con estatuas de formas arquitectónicas, usual en esos tiempos, se convierten en todo un conjunto para efectuar en los amplios jardines ostentosas celebraciones en las que participaba la gran realeza y cortesanos, la alta burguesía y los artistas protegidos por el rey.
El teatro de Moliere y Racine estrenaron muchas de sus obras en los festejos que la corte efectuaba en Versalles.
El clasicismo francés o arquitectura barroca, antecedida por los estilos del Renacimiento y Manierismo francés, y seguido a mitad del siglo XVIII por el Neoclasicismo, encuentra su inspiración en el estilo barroco italiano caracterizado por el orden colosal de las fachadas, el uso de columnatas y cúpulas, símbolos de dominio y nobleza del rey. A esto se suma la introducción de plazas urbanas monumentales que influenciaron todo el espacio del siglo XVIII en Europa.
Representativa extravagancia y elegancia en la arquitectura, literatura y música vista en el exceso de ornamento multiplicado de elementos decorativos como la doradura, los arabescos de estuco, las bóvedas pintadas; la búsqueda de espiritualidad de sensaciones y pasiones aprisionadas está presente en los artistas cultivadores del arte barroco.
Combina elementos clásicos especialmente colosales, con los órdenes de columnas, las decoraciones exuberantes en fachadas e interiores usadas con menos frecuencia en iglesias y más en residencias de campo y palacios reales. Integra a la arquitectura la casa con los jardines formales a su alrededor, conocido como « jardín formal francés».
Data de 1623 el Versalles situado a 21 km de París. Con la construcción de más de 800ha para 2,300 estancias a partir de la construcción existente se edifica el palacio que en un inicio fuera concebido para recibir al rey cuando cazara y que Luis XIII utilizara cuando solía cazar con su padre por aquellos contornos de zonas agrestes pantanosas en busca de alguna libertad.
Louis Le Vau fue una de las figuras centrales del estilo barroco francés temprano. Se le encomienda por el rey agrandar el Palacio Versalles. Se realiza un primer intento de ampliación al castillo que, más tarde, sin destruir el original, volvería a ampliarse en el mandato de Luis XIV. Es el momento en que Louis, junto a Charles Le Brun y André Le Nôtre entran en acción para agrandar el palacio y en el caso de André introducir en el conjunto arquitectónico un jardín formal que pudiese verse desde el Château. A la muerte de Louis sería Jules Hardouin-Mansart quien continuaría la obra.
El palacio de sobrio y majestuoso aspecto ejemplifica con creces el clasicismo francés. Se empleó como residencia real desde 1682 hasta 1789. Impresionan los más de 600 m de contorno y fachadas de columnas orden toscano en el primer nivel, monumentales, una abierta a la ciudad, y otra, a los jardines.
La estampa del palacio gira en torno a la figura del rey. Tomando como base el pabellón antiguo de Luis XIII queda como núcleo del nuevo edificio en U, donde la envoltura en U se orienta hacia los jardines dispuestos en tres niveles: planta inferior, planta noble y ático; es recubierto y se prolonga en forma de alas alargadas con patios internos y pasillos de distribución. El ala derecha destinada a despachos administrativos, y la izquierda reservada para los príncipes por lo que las habitaciones reales permanecen en el eje central del conjunto.
Los jardines ordenados y racionales perfilan la arquitectura del palacio: callejones geométricos, piscinas, hileras de árboles, fuentes y esculturas mitológicas relacionadas unas con otras, estanques que proporcionan un efecto visual placentero. En fin, la disposición del palacio tan geométrica con distorsiones da idea o ilusión de armonía perfecta. De conjunto, es expresión de señorío del rey sobre su entorno.
Charles Le Brun creó el interior y la sala más famosa del palacio, el salón de los espejos, que daba al nuevo jardín. Fue este el símbolo de todo el estilo barroco francés, abierto a los visitantes; se convirtió en un inmenso teatro donde el rey llevaba a cabo sus ceremonias de etiqueta minuciosa a la vista de los asistentes.
La capilla del palacio y la ópera real están en el ala norte. La ópera real es el teatro y ópera principal construida totalmente de madera con una técnica de falso mármol y capacidad para 712 personas.
En 1687 se establece el Grand Trianon, como segunda residencia del rey Sol, que cuenta con un solo piso decorado en yeso y mármol, de columnata abierta y largas alas. Su sencillez lo convirtió en musa para muchas construcciones en países de Europa.
Entre otros, te dejamos aspectos importantes sobre el palacio de Versalles.
. El palacio de Versalles no ha vuelto a ser residencia real desde el reinado de Luis XVI, pero sigue mostrando al mundo su grandeza.
. Lugar clave para la diplomacia, testigo el 28 de junio de 1919 de la firma de paz que pusiera fin a la primera guerra mundial fue más tarde conocido por el mundo entero como el Tratado de Versalles.
. Actualmente el público puede visitarlo por ser Patrimonio Histórico; en él se organizan diversos espectáculos entre los que está el revivir el tiempo de los reyes.
. Desde 1862 ha sido considerado Monumento Histórico.
. El palacio y los jardines de Versalles son Patrimonio de la Humanidad declarado por la UNESCO desde 1979 incluyendo al gran y pequeño Trianon.
. Es el museo más grande de la historia del mundo con 18000 m² y una colección de cuadros organizados por series históricas.
. Alrededor de tres millones de personas visitan anualmente los tres palacios: Versalles, gran Trianon, pequeño Trianon, y 7 millones, los jardines, de ellos más del 70% son visitantes extranjeros.
. Versalles, uno de los sitios más visitados de Francia, hubo de cerrar sus puertas ante la pandemia, puertas que ya están nuevamente abiertas al público.
. En 1717 fue visitado el Versalles por Pedro el Grande, Zar de Rusia, quien se alojó en el Trianon.
. En 1896 el último de los zares rusos, Nicolás II, descendiente de Pedro, visita el Versalles acompañado de su esposa y reposan por unas horas en los que fueran aposentos privados de Luis XV y Luis XVI.